Antes de poder hablar sobre como curar y cuidar un tatuaje recién hecho hay que dejar claro qué significa hacerse un tatuaje.
Todos sabemos que mediante la técnica del tatuaje obtendremos un motivo de decoración permanente en nuestro cuerpo pero la mayoría de las veces no nos paramos a pensar en qué consiste tatuarse.
La técnica del tatuaje consiste en introducir una serie de pigmentos colorantes en la piel mediante pequeñas punciones realizadas con una maquinaria específica y agujas diseñadas para este fin.
Cómo podéis imaginar, consiste en una técnica invasiva que rompe una de las barreras naturales del cuerpo y produce una herida abierta en la piel, por lo tanto no está exenta de riesgos y hay que extremar las precauciones para prevenir cualquier tipo de problema.
Si vas a un estudio de tatuajes profesional y certificado puedes tener la tranquilidad de que los riesgos serán mínimos ya que la mayoría de los materiales son desechables, y los que no lo son, se desinfectan y esterilizan debidamente, por lo tanto, la mayoría de los riesgos de hacerse un tatuaje serán evitables y por eso es tan importante el cuidado que le dediquemos cuando salgamos por la puerta del estudio con nuestro flamante tatuaje nuevo, ya que la responsabilidad de su cuidado es tuya.
Existen muchas técnicas diferentes para curar un tatuaje y cada artista recomienda la que mejor le funciona, por eso es importante prestar atención a las indicaciones que te den el día de tu tatuaje, pero nosotros vamos a explicar una muy tradicional y sencilla que lleva años dando buenos resultados y que es la que nosotros recomendamos en nuestro estudio porque la hemos probado y experimentado en nosotros mismos.
El día de tu cita saldrás del estudio con tu tatuaje tapado con un film transparente. Este film lo tienes que retirar con las manos limpias cuando pasen entre 1,5 y 2 horas, a continuación lava el tatuaje cuidadosamente con agua y jabón sin perfume y sécalo con papel de celulosa (papel de cocina), que no se deshace ni deja pelusas. Ahora extiende una fina capa de crema para tatuajes (en Clown Tattoo recomendamos y cuidamos nuestros propios tatuajes con Pandabalm) y déjalo al aire.
Durante la primera fase de la curación tendrás que lavar y echar crema en el tatuaje unas 3, ya que es muy importante mantenerlo limpio y protegerlo. Los primeros días notarás la zona dolorida y puede que algo roja e hinchada, es una sensación similar a quemarse con el sol. Poco tiempo después puede que la zona se reseque y le salga una pequeña costra que no debes tocar ni arrancar, sigue con los lavados y la crema hasta que la costra se caiga por completo o hasta que notes que la piel recién tatuada se ha regenerado por completo (dependiendo de la persona pueden pasar entre una semana un 15 días).
Durante estos días no uses ropa que se pueda quedar pegada al tatuaje o que suelte pelusas y trata de tenerlo al aire el máximo tiempo posible. Evita la suciedad y el contacto de animales en esa zona y el sudor en la medida de lo posible, por lo que es preferible no realizar deporte durante los primeros días y lavarlo y curarlo inmediatamente después cuando se empiece a practicar.
Otras precauciones que tienes que tener son evitar la playa, piscinas, saunas, jacuzzis, etc… durante los primero 15 días y protegelo del sol evitando exponerte al sol o a rayos ultravioletas a ser posible un mes.
El proceso de cura de tu tatuaje ya casi ha terminado, a partir de aquí sigue siendo importante lavarlo bien al menos una vez al día y aplicar crema durante el primer mes completo. Esto hará que la piel sane de la mejor forma posible y que los resultados obtenidos sean mejores. Aun así, lo normal es que un tatuaje ya curado pierda brillo y que los colores sean un poco menos vibrantes. Una vez transcurrido un mes desde el día de tu cita, puedes pasar por tu estudio para que puedan valorar el estado de tu tatuaje ya completamente curado porque antes de que pasen unos 30 días no se puede saber cuál será el resultado final.
En resumen, una vez que tengas tu nuevo tatuaje:
Retira el film a las 1,5 o 2 horas, lávalo y aplica crema para tatuajes.
Lávalo y cúralo 3 veces al día hasta que deje de ser una herida.
Sigue lavándolo al menos una vez al día e hidratándolo hasta completar un mes.
Evita la suciedad, el contacto con animales en la zona, los espacios húmedos y el sol durante el mayor tiempo posible.
Lo normal es que lleguemos al final del proceso de cura de un tatuaje sin haber tenido ningún tipo de complicación, pero como ya hemos comentado, no deja de ser una herida abierta, así que si tienes dudas o sospechas de que algo no va como debería, es el momento de visitar a tu artista para que te de las indicaciones pertinentes.